martes, 11 de febrero de 2014

KREISKY ACEPTARÍA PRESIDIR UN GOBIERNO MINORITARIO CON CARÁCTER PROVISIONAL

Por HERMANN TERTSCH
EL PAÍS Viena, 05.04.83


A tres semanas de las elecciones generales del próximo 24 de abril se multiplican en Austria las especulaciones sobre nuevas fórmulas de Gobierno ante la posible pérdida de la mayoría absoluta del partido socialista (SPOE), que encabeza el canciller Bruno Kreisky. Forzado, al parecer, por su partido, que no quiere ni puede prescindir de la enorme popularidad del viejo canciller, éste ha matizado su rotunda negativa a encabezar un Gobierno que no sea monocolor y basado en una mayoría absoluta.

Kreisky ha manifestado que estaría dispuesto a formar un Gobierno socialista minoritario como solución transitoria hasta la convocatoria de nuevas elecciones. Sin embargo, y a pesar de las recomendaciones en sentido contrarío de otros miembros de la vieja guardia del partido socialista, Kreisky ha ratificado su intención de no participar en un Gobierno de coalición con los democristianos. En caso de que la correlación de fuerzas en el nuevo Parlamento hiciera necesario una coalición de este tipo, Kreisky ha anunciado su retirada de la vida política activa.

La jubilación de Kreisky, con trece años en el poder, el jefe de Gobierno democrático más veterano de Europa, haría necesaria una profunda reestructuración del partido socialista, cuyos éxitos en los últimos años se han debido en gran medida a la personalidad de su dirigente.

Liberales y 'verdes'

Otra posibilidad, en caso de que los socialistas perdieran la mayoría absoluta, la de una coalición con el pequeño partido liberal (FPOE), que no ha sido descartada en un principio por Kreisky, choca con el peligro que corren los liberales de no acceder al nuevo Parlamento, debilitados como están por la irrupción de los verdes en el escenario político austríaco. En el partido verde, que ideológicamente se encuentra muy a la derecha de su homónimo alemán, nada más constituirse han surgido los primeros enfrentamientos a causa del personalismo de sus integrantes, y ya se han producido deserciones y expulsiones de varios miembros fundadores. Este partido -que carece de programa político- aparte de algunas consideraciones generales sobre el medio ambiente y ciertas propuestas claramente conservadoras, como la limitación del derecho al aborto, puede quitar a los liberales los votos que éstos necesitan para alcanzar una representación parlamentaria. La otra formación política que se presenta por primera vez a las elecciones austríacas es la Lista Alternativa, formada por pacifistas y ecologistas de izquierda e ideológicamente afín a los verdes de la República Federal de Alemania.

Es posible, que las elecciones del 24 de abril supongan el fin de la era Kreisky, aun cuando los socialistas sigan siendo el partido mayoritario, y que se registre un profundo cambio en el escenario político austríaco. A falta de sondeos fiables, el resultado de los comicios es más ímprevisible que nunca. Es tan posible que el próximo Parlamento austríaco cuente con la presencia de cuatro partidos -socialistas, democristianos, liberales y verdes- como que sólo alcancen representación parlamentaría los dos grandes partidos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario