Por HERMANN TERTSCH
El País, Bonn,
16.06.87
La vista de uno de los casos más graves de espionaje de la
historia de la República Federal de Alemania (RFA) comenzó ayer en Düsseldorf.
La acusada es Margarita Höke, de 51 años, secretaria de la Presidencia de la
República desde 1959 hasta su detención en 1985, y, según la fiscalía federal,
desde 1971 agente al servicio del Comité de Seguridad del Estado soviético
(KGB). La acusación indica que durante casi tres lustros, suministró al KGB
centenares de documentos secretos y confidenciales. Desde su puesto tenía
acceso a documentos de estrategia de política exterior, del Ministerio del
Interior, de protección civil, contraespionaje y defensa, así como de las
cuestiones confidenciales tratadas en los consejos de ministros.
Como en otros casos de espionaje por parte de secretarias en
el Gobierno e instituciones de Bonn, Höke fue captada por un hombre con
supuestas intenciones de contraer matrimonio, que actuaba bajo el falso nombre
de Franz Becker.
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